Revista invi N°12/Agosto 1991/Año 6:5-12

ARTÍCULO

PROYECTO: UNA CASA PARA CHILOÉ. CENTRO PROFESIONAL CAHUALA.

El Centro Profesional Cahuala es una agrupación de profesionales jóvenes provenientes de Santiago que se han radicado desde 1987 en las cercanías de Castro (Isla de Chiloé) buscando nuevos horizontes y formas de vida. Está integrado por Arquitectos, Ingenieros, Psicólogos, Educadores, Geógrafos, Historiadores y atienden multidisciplinariamente las demandas de la población isleña, principalmente en educación, salud, arquitectura, urbanismo y construcción. Motivados por el actual debate de la Vivienda Regionalizada, nos han hecho llegar este trabajo. El Instituto lo da a conocer en ese contexto.

CHILOÉ


El chilote se echa a la mar. Antes fue a buscar el alerce a la cordillera y el ciprés a las Guaitecas. Ahora, va a trabajar a la Argentina, a la esquila en la pampa magallánica, o se va a la pesca, cruzando el Corcovado. En Chibé lo esperan sus sueños, su familia, tradición de doscientos años y un largo invierno gris y lluvia, al lado de la cocina, siempre encendida. Chi loé todavía conserva su silencio y paz de isla. El invierno se la cuida. La casa para el hombre de Chiloé significa una necesidad vital. Ella es todo lo que el medio no le otorga: lugar de cobijo, de calor, lugar donde transcurre la mayor parte del tiempo. La casa se constituye en una aspiración, en una culminación.

SU ARQUITECTURA


En la arquitectura de la casa de Chiloé se reconoce un elemento constante: un volúmen sencillo y rectangular, a dos aguas, que se salpica de elementos expresivos: pórticos, miradores, galerías y corredores abarandados. La casa chilota recoge la añosa tradición del isleño y guarda su identidad y su arraigo, su alegría y su esperanza.

CONSIDERACIONES SOBRE LA VIVIENDA BASICA EN CHILOÉ

Si pensamos en la vivienda básica como una solución habitacional para la familia chilena podemos decir que, técnicamente, logra un producto barato, factible de construir.
Sin embargo, al considerar las diversas formas de vida que coexisten en nuestro país, encontramos que los diseños de vivienda básica no tienen capacidad para resolver sus requerimientos, respetando la tradición y cultura local que, en definitiva, conforman nuestra identidad como nación.
La manera de vivir de un minero en el norte es muy diferente a la de un obrero urbano de Santiago y ambas, a su vez, muy diferentes a las de un pescador de Chiloé.
Con énfasis, manifestamos que el diseño de la vivienda básica actual no respeta la forma de vida del chilote, al no ofrecerle un espacio físico acorde con su tradición y sus costumbres.
Creemos válido planteamos la pregunta: ¿qué es y qué fines debe lograr la vivienda básica en Chiloé?. La versión empleada en el centro del país no es la adecuada a la zona, ni siquiera desde el punto de vista de costos. Entendemos que debe ser aquella unidad básica que permita al poblador una vida digna y ordenada, en relación con su identidad, sus costumbres y su dignidad.
Podemos exponer algunos elementos que ilustren lo anterior:
• Falta de jerarquización de los espacios, que dé un orden a la convivencia familiar : los diseños de la vivienda básicase esmeran en lograr la máxima utilización del espacio, pero desde un punto de vista geométrico. Podemos decir que las soluciones que entrega están muy bien resueltas en el plano. Sin embargo, la vida que se desarrolla en esta vivienda, está llena de roces y torpe-zas, generando una situación de hacinamiento familiar. La vida del chilote requiere de un espacio central en donde se desarrolla la convivencia familiar, en torno a la cocina a leña.
• Mantención y distribución del calor: es uno de los requisitos fundamentales para una vivienda en Chiloé. Un diseño con ventanales amplios, más adecuados para la zona norte, sumado a una construcción con materiales ligeros producen, si no hay una especial atención én el diseño, un fuerte deterioro de la eficacia técnica de la vivienda.
• Materiales empleados: para lograr que la vivienda básica dure los veinte años que están especificados, pensamos que debe mejorarse la calidad de los materiales empleados. Como ejemplo podemos citar los revestimientos exteriores de planchas de fibrocemento, que si bien tienen buena resistencia a la humedad, presentan una alta fragilidad. La reposición de estas planchas, dentro de los períodos de garantías, implican que el SERVIU debe incurrir en mayores costos, que aparecen encubiertos en relación a los presupuestos originales.
Un caso similar se presenta en los pavimentos interiores, en los cuales se utiliza madera verde o de baja calidad, que al contraerse produce rendijas de gran tamaño. La reparación de este piso significa levantar todo el enmaderado, reclavar y agregar las tablas faltantes, por la contracción, más las tablas que se rompieron en el proceso.
Un segundo aspecto que nos parece de importancia es el no uso de ciertos materiales de la zona, tales como la tejuela, los forros de madera y las fundaciones de pilotes de luma. Estos materiales, que pueden producir ciertas economías, revitalizan la identidad arquitectónica de Chiloé, dando a la ciudad atractivo y uniformidad.
• Ampliación de la vivienda : la experiencia al respecto nos indica que los planos de ampliación propuestos por el SERVIU rara vez se aplican, ocurriendo que las ampliaciones que ejecutan los asignatarios carecen de armonía con la vivienda y con el conjunto de viviendas como tal.
Beneficiarios del sistema : podemos observar que en las últimas adjudicaciones en la ciudad de Castro el sector beneficiado no ha sido aquel que presumiblemente se pretendía como destinatario de este subsidio. Es así como vemos que los favorecidos corresponden a grupos de profesores o similares en cuanto a nivel socio-económico.
Pensamos que para reorientar los esfuerzos de este beneficio, debería aumentarse el monto del subsidio para las viviendas del D.S. 62; o bien, modificar los criterios de asignación de éstas.
Montos establecidos por MINVU para la construcción de las viviendas : en Chiloé nos encontramos con mayores costos de construcción que en la zona continental, principalmente por razones de transporte, escasez de áridos, valor de mano de obra ,etc.
Estos mayores costos significan menores niveles en la calidad de la construcción de las viviendas, en consideración a que los montos que oscilan entre 210 a 220 UF por vivienda son fijos para todo el país.
En este punto podemos agregar también que el alza de los precios de materiales y mano de obra en los últimos años supera largamente (100 % y más) al registro que ha implicado la variación de la UF, situación que también afecta el nivel de construcción de las viviendas.
Elementos para una Vivienda Social en Chiloé. Deseamos que la vivienda social otorgue un nivel de vida digno a los pobladores de Chiloé y que respete la forma de vida de la familia chilota, integrándose armónicamente tanto al entorno natural como al entorno urbano donde estará situada.
Algunos aspectos nos han parecido fundamentales:
• Que acoja la forma de vida chilota, estableciendo un espacio de convivencia familiar en torno a la cocina, que es la fuente de calor de la casa.
• Que la casa mantenga el calor y lo aproveche al máximo, permitiendo un mayor confort con menor consumo de leña.
• Que pueda crecer de tal forma que cada etapa mantenga una armonía con los volúmenes de la vivienda y del conjunto de viviendas que la rodean. Además, este crecimiento debe lograrse con un máximo de economía.
• Que integre materiales de la zona, lo que contribuye a una economía en la construcción y a una conservación del patrimonio arquitectónico de Chiloé, de su cultura y de su identidad. Como ejemplo podemos citar el revestimiento de tejuelas y las fundaciones en pilotes de madera (lumilla), el forro interior en tablas de tepa, etc.
• Que la distribución interior ofrezca una jerarquización de los espacios, permitiendo así una vida familiar ordenada y digna.

PROPOSICIÓN

En base a los elementos analizados en las discusiones anteriores hemos elaborado una solución que satisface las condiciones de nivel de vida de sus residentes y, por otro lado, de las asignaciones presupuestarias para los planes de subsidio habitacional.
Presentamos una vivienda de 40,18 m2, en dos pisos, cuyo programa se distribuye como sigue:
Una unidad central comedor-cocina-estar, en la cual se desarrolla la vida familiar, y que viene a ser el centro del calor y de la actividad. En el segundo piso se encuentran los dormitorios y el baño, logrando una independencia con el resto de la vivienda y aprovechando, por su ubicación, el calor generado en la cocina.
La vivienda goza de la posibilidad de ampliación en forma rápida y económica, que el mismo diseño original ya ha sugerido, asegurando así que el crecimiento natural siempre conduzca a un resultado armónico.
Asimismo integra diversos materiales de la zona, tales como la tejuela, los forros interiores de madera, los elementos estructurales de madera y otros.
La vivienda propuesta responde así a la forma de construir en Chiloé, con los materiales que se han utilizado tradicionalmente y con técnicas constructivas que conocen los carpinteros de la isla.
La necesidad de dignificar la vida de los habitantes de Chiloé, respetando su tradición y costumbres, reforzando su identidad y acogiendo su modo de vida, nos han llevado a la proposición que hemos presentado, convencidos que ésta sí es una vivienda básica para Chiloé.